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Casamiento

¿Cómo hacer una corona de paniculata?

¿Estás buscando crear una manualidad simple y hermosa? Te contamos el paso a paso de una corona con múltiples usos, que te va a encantar.

La propuesta que te acercamos hoy es una corona que vas a poder lucir en tu cabeza, como parte del atuendo nupcial, que podrán llevar las niñas que rieguen pétalos a tu paso hacia el altar o, combinadas en diferentes tamaños, podrán colgarse como decoración de algún rincón de la fiesta. El elemento principal a utilizar son las flores de un follaje llamado paniculata, más conocido como naranjillo, flor nube o flor velo de novia.

Materiales

  • Paniculata
  • Alambre grueso
  • Cinta adhesiva de papel en color verde
  • Pinzas
  • Alicate
  • Alambre fino
  • Cintas

Paso 1

Tomar un alambre grueso del largo necesario para formar la circunferencia que deseemos, calculando un par de centímetros extra para crear el cierre. Forrarlo en toda su extensión con la cinta de papel verde. Esto servirá de base para el resto del trabajo.

Paso 2

Con la pinza, formar ojales en ambos extremos del alambre forrado. Uno podrá quedar totalmente cerrado y el otro permanecerá abierto a modo de gancho, para luego ser unidos.

Paso 3

Con el alicate, cortar ramitas de la paniculata considerando el grosor que se le desee dar a la corona. Cuanto más tallo tenga cada ramita, más fácil será manipularla y adherirla al trabajo.

Paso 4

Iniciar una costura con el alambre fino en el alambre grueso.

Paso 5

Afirmar con el alambre fino las ramitas de paniculata al alambre grueso, superponiendo cada ramita al tallo de la anterior.

Paso 6

Unir los extremos del alambre grueso ya recubierto en su totalidad por las ramitas de paniculata, haciendo entrar el gancho por el ojal, y con la ayuda de la pinza, cerrar el gancho para que los extremos ya no se separen. 

Paso 7

Con cintas en composé del vestido o la ambientación, crear un lazo como detalle final de la corona, que también podría servir para colgarla.

En las fotos del ejemplo este trabajo está realizado con flores blancas, pero esta variedad también puede conseguirse en tonos lilas, azules y rosáceos. Es una manualidad ideal para varios estilos de casamientos: campestres, rústicos, románticos o vintage, que puede complementarse bien con otros detalles que utilicen el mismo elemento principal. La paniculata se puede utilizar para decorar el altar, poniéndola en jarrones, en frasquitos como centro de mesa, o como parte del ramo. Al tener flores pequeñas y delicadas, va bien tanto en arreglos donde es la protagonista absoluta, como en aquellos donde se combina con flores más grandes y de otro color.

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